Si incluimos intereses, en un caso así debemos rememorar que el que los ingresa debe declararlos en en el IRPF y el que los abona debe hacer una retención a cuenta, pero tal y como decimos, no es en absoluto preciso. Es fácil que nos haya ocurrido en mucho más de un instante que alguien cercano nos pida que le ayudemos, que le financiemos. Y asimismo es bastante normal que, al margen de consideraciones éticas, morales o del análisis de la solvencia de la persona y de la viabilidad del préstamo, nos deje paralizados el no entender de qué forma dar forma a esta operación. En caso de que perdamos todo o parte del depósito por el incumplimiento del deudor podemos utilizar los documentos del banco y de las acciones judiciales del mismo contra el moroso, ya que nos subrogaríamos en su situación.
El dinero no lo vamos a prestar nosotros, lo va a prestar un banco, en las condiciones que se convengan. Para hallar que estas sean lo mucho más ajustadas posibles, el potencial prestamista que no va a serlo pone como garantía del préstamo un depósito por idéntico importe. El banco cobra el préstamo como cualquier otro, y en el caso de que se impague puede ejecutar la garantía cancelando el préstamo restante contra el depósito. Debemos tomar en consideración que, a veces, por más que garanticemos con un depósito una operación de este modo, algunos bancos no la admitirán, en especial si no somos clientes de ellos previamente, para evitar cualquier contingencia relacionada con blanqueo de capitales, rescisiones de acreedores, provisiones de insolvencia por operar con clientes del servicio quebrados, etc. Seguramente sea un poco mucho más costoso que un préstamo directo entre particulares, pero el coste efectivo reduce si renunciamos a remunerar nuestro depósito, en tanto que al nulo peligro se le añade la captación y bloqueo del deposito para la entidad financiera. Una pregunta frecuente es, si es necesario que haya un género de interés en los contratos entre particulares, entre familiares o amigos.
¿Por Qué Debemos Ser Cuidadosos Con Los Préstamos Entre Particulares?
Para evitar que Hacienda pueda considerar que estamos ante una donación, en cuyo caso estaría sujeto al Impuesto de Sucesiones y Donaciones, con la consiguiente factura fiscal, agravada en muchas ocasiones por el olvido de no liquidarla. Tampoco charlamos de esos pequeños micropréstamos que muchas veces tienen mucho más de donación que de otra cosa, y que se substancia con esa frase de “ya me lo devolverás cuando consigas”. La absoluta periodicidad y rigor en el cobro de las cuotas del préstamo nos ayudan a ir rebajando riesgo. Nos encontramos obligados a ello, pero tranquilos, que estos préstamos están exentos del Impuesto de Transmisiones y Actos Jurídicos Documentados, con lo que es un mero trámite,obligado, pero trámite sin costo.
Caso de que nos ejecuten el préstamo y perdamos el depósito nunca superará la perdida que hubiese podido generarse con un préstamo directo. Un consejo agregada es que junto con el préstamo documentemos los medios por los que lo hicimos efectivo , lo que siempre será mejor que una distribución en efectivo. En España, la educación financiera es una asignatura pendiente y el manejo del dinero, un tema tabú en las conversaciones. Más allá de que los jóvenes ya usan la tarjeta de débito o realizan pagos con el móvil, como algo frecuente, el Banco de España advierte de que su nivel de conocimiento sobre el planeta de las finanzas sigue siendo escaso. Por ese motivo, es recomendable comenzar a enseñar ciertos conceptos desde la infancia.